domingo, 25 de mayo de 2008
El Ejército israelí decidió el domingo retirar soldados de un cuartel general cercano a un cruce fronterizo con la Franja de Gaza, que se ha convertido en un blanco frecuente para militantes palestinos.
El coordinador de actividades de Israel en los territorios palestinos ordenó la transferencia temporal de más de 100 soldados no-combatientes y de personal civil de cruce fronterizo de Erez, debido a la constante amenaza de ataques de los militantes de Gaza, dijo el portavoz Peter Lerner.
La medida se da a conocer en momentos en que Egipto trata de mediar un cese de fuego entre Israel y los grupos militantes palestinos en el territorio controlado por Hamas. El Cairo hasta ahora no ha podido asegurar una tregua.
Militantes de Gaza disparan proyectiles casi diariamente en localidades del sur de Israel, causando pocos heridos pero produciendo un amplio pánico. El jueves un atacante suicida palestino hizo estallar un camión cargado de explosivos cerca del cruce. Ningún israelí resultó muerto.
El Ejército con frecuencia lleva a cabo incursiones terrestres y ataques aéreos en la Franja de Gaza y ha impuesto un bloqueo alrededor del enclave, en lo que describe como una operación para reducir los ataques en cruces de frontera.
La decisión de sacar soldados fue criticada por algunos legisladores israelíes. El sitio de internet de noticias de Israel YNet citó al legislador Zevulun Orlev diciendo que era "una solución de cobardía."
El primer ministro israelí, Ehud Olmert, hasta ahora ha parado el lanzamiento de una invasión más amplia a Gaza, pero está bajo creciente presión política para tomar acciones más duras.
"En lugar de enfrentar el problema huyen (...) dejándome a mí y a mí hijo y mí mujer embarazada, que nos arreglemos," dijo a Radio Ejército un residente del sur de Israel, Shaiki Gavish.
En noviembre, un cohete lanzado por militantes de Gaza impactó una base de entrenamiento en el sur de Israel, hiriendo a 35 nuevos conscriptos. Los padres de algunos de los soldados heridos pidieron que la base fuera retirada de ese lugar, pero el Ejército se negó y en cambio fortificó los cuarteles.
Seis morteros y cohetes se dispararon el domingo al sur de Israel, reportó el Ejército.
Fuente: Reuters
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